lunes, 1 de abril de 2019

Técnicas de estudio: LA LECTURA


Leer
 Consejos previos:
  • Una lectura lenta y completa, teniendo siempre en mente cuando se lee el título o subtítulo del capítulo.
  • Otro consejo frecuente: LEER ACTIVAMENTE (Harry Maddox). La lectura tiene que ser activa. Hay que subrayar, para resaltar los conceptos más importantes, poner señales - una cruz, una estrella - para personalizar el texto, para hacerlo tuyo y para que no sea una sopa de letras.
La lectura es uno de los aprendizajes más importantes que proporciona la escolarización. Hoy en día se hace casi imposible que alguien pueda desenvolverse en este mundo repleto de textos sin haberlo adquirido. Pero la lectura no sólo influye positivamente en el comportamiento social de la persona (lo que ya es fundamental) sino que se ha demostrado que la adquisición de esta competencia influye decisivamente en el desarrollo de las denominadas capacidades intelectuales superiores como son el pensamiento crítico, la capacidad de reflexión…
 Tras esto debemos tener una perspectiva general del capítulo:
1. EXPLORAR
2. PREGUNTAR
3. LEER
4. RECITAR
5. REPASAR
En las primeras etapas de su aprendizaje, la lectura es un hecho pasivo. Es decir, lo importa ne es que los escolares sean capaces de familiarizarse con los distintos símbolos gráficos y su significado. Sin embargo, al año o dos años estos escolares ya son capaces de interpretar sin problemas y con cierta fluidez estos símbolos. Ya están preparados para que la lectura deje de ser pasiva a activa. Es decir, la lectura no como fin, sino como medio generador de aprendizaje.
 Te dejamos unos consejos para que refuerces esa lectura activa:
  1. Pensar en lo que estás leyendo. A veces puedes estar leyendo algo y estar pensando en otra cosa. Hay que leer y analizar a la vez para que sea lectura activa y no perder una alta concentración.
  2. Trata de responder a las preguntas que te has hecho. Reformula tus preguntas si es necesario
  3. Responde a las preguntas que hace el autor del libro.
  4. Hacer un reto contigo mismo relacionado con el texto que estás leyendo. Rétate contigo mismo, continuamente sobre si estás entendiendo lo que lees.
  5. Es bueno subrayar y hacer anotaciones mientras se lee. En una segunda lectura estas anotaciones te ayudarán mucho. Hay que subrayar, para resaltar los conceptos más importantes, poner señales - una cruz, una estrella - para personalizar el texto, para hacerlo tuyo y para que no sea una sopa de letras...
  6. Presta atención sobre todo lo que el autor intente llamar tu atención (itálica, subrayados, gráficos, recuadros...). Analízalos lenta y cuidadosamente.
  7. Detente y relee aquellas partes que no estén claras. Anotar al margen.
  8. Cada vez que lees una palabra que no comprendes, busca su sentido en un diccionario. Hay muchos diccionarios en Internet gratis. Utilízalos... Ej, Historia.